22 jun 2012

¿Las neuronas se regeneran para oler?




¿Nuestros cerebros siguen produciendo neuronas a lo largo de nuestras vidas? Desde los años 50, diversos estudios insinuaron esa posibilidad, pero recién a fines de los 90 se demostró que seguían naciendo nuevas neuronas (un proceso denominado neurogénesis) en los cerebros de primates y seres humanos adultos.

Neurogénesis

Ahora, un estudio nuevo en humanos mostró que en el bulbo olfatorio se pueden crear nuevas neuronas, pero no sobrevivir. Según algunos investigadores, el hallazgo podría descartar que exista neurogénesis en esta área o mostrar sólamente que algunas personas no tienen suficientes estímulos cerebrales olfativos.

En estudios anteriores se hayaron evidencias de neurogénesis en el bulbo olfatorio de humanos adultos, pero sólo se midieron las proteínas producidas por neuronas inmaduras y dejaron así abierta la cuestión de si estas células jóvenes crecieron para conectarse con otras neuronas y formar redes funcionales.

Si las nuevas neuronas olfativas realmente alcanzaron la edad adulta durante la vida de una persona, se deberían haber encontrado neuronas de distintas edades en esta región, pero esto no sucedió en el nuevo estudio.


Estudio de las neuronas
En la nueva investigación, el neurocientífico Jonas Frisén, del Karolinska Institute de Estocolmo, y su colega Kirsty Spalding usaron una técnica ideada en 2005 para descubrir la edad de las neuronas. Basándose en pruebas atómicas hechas en los años 50 y 60 que mostraron que las cantidades de Carbono 14 (C14) esparcidas en la atmósfera desaparecían gradualmente, dedujeron que, cuanto más tarde nacía una célula a partir de esos ensayos nucleares, menos C14 contendría.

Así, los investigadores midieron los niveles de C14 en los tejidos del bulbo olfatorio tomados durante la autopsia de 15 personas nacidas antes o después del período de pruebas atómicas. Lo que encontraron es que las neuronas de esa área eran todas de la misma edad (es decir, la del individuo del que provenían) y que, por tanto, no se había producido neurogénesis.

Dudas sobre los resultados
Las opiniones sobre los resultados están divididas. Para algunos podrían mostrar que los humanos evolucionaron a partir de los animales y perdieron la capacidad de producir nuevas neuronas en esta área porque no dependen tanto de su olfato. Y, para otros, mostraría que quienes viven en determinadas zonas podrían no estar suficientemente expuestos a nuevo olores como para mantener las neuronas vivas.

El neurobiólogo Jeffrey Macklis, de la Universidad de Harvard dijo que el estudio, aunque riguroso, no resuelve esta cuestión. Este investigador descubrió que, en los ratones, las neuronas recién nacidas juegan un papel único en el aprendizaje de nuevos olores y mueren si no son reactivadas con olores nuevos y desconocidos.

«Como las personas dependen menos que los roedores del olfato, podríamos tener comparativamente menos de estas neuronas y las pocas que creamos no sobreviven porque no están expuestas a la misma cantidad de olores que otros animales. En las ciudades más occidentalizadas las personas se duchan todos los días, usan desodorantes y ambientadores, es decir que salen de su estilo de vida natural para asegurarse de que los únicos olores a los que se expondrán serán los que ya conocen», aseguró Macklis.


Factores que disminuyen la neurogénesis
Además, Macklis señaló que las muestras de tejido tomadas podían haber alterado los resultados porque muchos donantes tenían un historial de abuso de sustancias o enfermedades psiquiátricas, ambos factores que disminuyen la neurogénesis. Por eso, sostiene que una prueba mejor sería repetir el experimento en personas sanas expuestas constantemente a nuevos olores, como chefs, sommeliers, perfumistas o viajeros a lugares exóticos.


Por otra parte, el neurocientífico Fred Gage dijo que la disminución en la neurogénesis puede mostrar que los animales evolucionaron a partir de cuadrúpedos a primates y humanos y que, en ese proceso, el sentido del olfato se volvió menos importante para la supervivencia.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Comparte este artículo en Twitter, Facebook, Google +1 si te ha gustado...